¡¡Hola Camaleones!!
En tiempos inmemorables el jornal ¾, gozaba de una época de esplendor. Su éxito
se debía, a que todas sus gentes se preocupan de incorporar en todo lo que hacían,
la idea de equilibrio y sostenibilidad.
El reino era
gobernado por un sabio emperador, pero tras un gran hombre siempre existe una
gran mujer. De muy pocos era conocidos que el mejor consejero del emperador, no
era un viejo sabio o un gran general. Si no, su única hija llamada Shi. Ella
encontraba siempre soluciones justas y sabias, para los problemas del prospero estado. Toda
su habilidad se debía, a su inteligencia innata y su práctica del conocimiento
aprendido.
Para Shi era muy importante el equilibro entre todos los seres, que gobernaba su padre. Por eso, siempre que los guerreros de la
legión ¾ ganaban una batalla o conquistaban alguna nación enemiga, le decía a su
padre que organizase un gran festín, para honorar a sus guerreros.
A pesar de que el sabio emperador, siempre ha querido radicar el sector militar, por creer que es más efectiva
la diplomacia. Shi creía que sin milicia no podía haber existido nunca la
diplomacia. Por ello los guerreros merecían ser honrados por su emperador.
En el banquete a parte del buen comer, el anfitrión era
amante de las artes y organizaba un extenso espectáculo, desde bufones hasta
complicados números de magia. En último show que siempre cerraba la velada era el
ballet real, que bailaban todas las hijas, mujeres y concubinas del
Emperador.
My el guerrero más
condecorado de la campaña militar, al ver a Shi bailando sintió deseos de
poseerla. A pesar de que eso implicaba
traicionar a su emperador. No obstante,
sus ideas superficiales le nublaron la cabeza
y My, siempre pensó que las mujeres eran simple objetos para satisfacer
a los hombres, vivan donde vivan.
Además, sabía que que
el emperador, después de otra contienda se haría el soberano de los soberanos.
De todos es conocido que el emperador,
sentía despreció por la labor de los soldados. A pesar de que ellos luchaban por honrar a su
persona e intimidar a sus enemigos.
Por ello My, en terminar el festín no se fue del palacio, si no que se escondió detrás de
un búcaro. Estaba decidido a buscar a la
joven. La encontró en una de las habitaciones
de la real infraestructura. La bella bailarina dormía en una habitación
individual, llena de lujos. Lo que hizo
comprender a My, que era más que una
concubina. Pero aunque no sabía cuál era
la relación con el emperador, tampoco le importaba.
Porqué solo quería violarla
y hacerla sufrir, para demostrar al emperador que la violencia solo se combate
con violencia y su profesión es digna de su aprecio.Los guardias del palacio se hicieron eco, del auxilio de la
joven, que gritaba sin parar. Entraron
en la dorada habitación y sin ver el rosto del agresor, los vigías decidieron apuñalar al traidor con sus lanzas. Sin embargo, la
feroz fuerza que emplearon por su asombro, también terminó con la vida de la
real joven.
Al ver lo sucedido, La
diosa danza decidió aparecerse. Porqué ella le regaló las virtudes, con las que Shi aconsejaba al emperador. La Madre del baile, consideraba a la hija del
emperador como su mejor obra, ya que, a
partir de las virtudes regaladas, Shi desarrolló
otras y las que tenía las perfeccionó.
La deidad a pesar de
su poder de creación, no podía devolver a la vida a la joven muerta. Pero si que le podía dar la inmortalidad de
forma de movimiento. Además también quería castigar al exitoso militar, por su forma de pensar que para nada,
representaba el pensamiento colectivo que había hecho grande la antigua nación.
La diosa quería dar la lección, que los actos de violencia no se terminan con violencia.
Si no con acciones, que tengan implícito un aprendizaje y ofrezcan aquel que tenga una visión negativa,
otra perspectiva. Por ello, condenó al
guerrero a servir por toda la eternidad
a la hija del emperador. Además la
deidad lo condenó a solo a ver sus
logros militares, solo cuando una mujer de su nación danzará con Shimy’s. Por
ello, siempre dependía del
cuerpo de una mujer o la decisión de una, hasta el fin de los tiempos.